Recordar a Néstor Kirchner es obligarnos a trabajar por los más débiles

Un nuevo aniversario del fallecimiento de Néstor Kirchner, que nos lleva hacia la reflexión sobre el gran legado que le dejó a la política de nuestro país.

Una transformación que comenzó tras la valoración del trabajo social, como paradigma de nuestros tiempos, luego de que la Nación estuviera tan olvidada y durante tantos años, particularmente, el interior.

Un legado puesto en la mirada de los más débiles y vulnerables. El escenario que podemos ver a diario y no sólo en lo que hace a la economía sino en todo, porque nos queda mucho por construir.

Un desafío que nos exige a imaginar y sostener políticas inclusivas como las soñó Néstor Kirchner, cambiando el objeto, poniéndolo a las personas como únicas destinatarias de las acciones públicas.

 

Nuestra agrupación “Valle Nuevo”, ha sido una de las primeras en Río Negro en valorar ese legado y no sólo lo hemos expresado desde lo discursivo, sino que dimos muestras concretas, como ser los hacedores, en nuestra ciudad (El Bolsón), de una plaza que lleva su nombre y un busto con su imagen.

Sin embargo, seguimos viendo que existen fuerzas que parecen querer vulnerar derechos. Y hoy más que nunca, el recuero del gran presidente de las últimas décadas, debe servirnos para mantener firme a esa herencia y al entusiasmo por trabajar con los más desprotegidos.

 

Esa es gran parte de la experiencia que venimos cosechando en el Circuito y en particular en la zona rural. Donde el trabajo político no reconoce carteles ni banderas. Sino la vocación por recuperar la dignidad de las personas.

Es allí donde se pueden comprender muchas de las decisiones de Néstor Kirchner: donde los pequeños productores han mejorado sus condiciones de venta; donde muchas familias han mejorado sus viviendas, donde el acceso a la salud ya no es una utopía.

Desde luego, se trata del trabajo silencioso, quizás, el que no sirve para las campañas mediáticas, pero sí se fundamenta en  la posibilidad de que miles de personas mejoren las condiciones de sus vidas. Y este es el compromiso que hemos asumido con nuestra Agrupación. Recordar aquéllos mandatos superadores en el trabajo cotidiano.

 

Con ese mismo entusiasmo y con la misma vocación, trabajamos para acompañar a los jóvenes de Ñorquinco, quienes decidieron dar un corte a tantos años de desolación, autoritarismo e indignación.

Un abuso que habla de otra época, de otro momento en la historia de nuestro país y que debe ser desterrado por completo.

Por eso, hoy más que nunca estamos convencidos de hacer honor a ese legado; a esa impronta puesta en la necesidad de atender a los más débiles. Hoy, desde nuestra Agrupación Valle Nuevo, recordamos a Néstor Kirchner y revalorizamos su enseñanza acompañando a Víctor Pinchulef y a Norma Pagnilef, quienes seguro accederán al Concejo y podrán comenzar con un proceso de transformación en Ñorquinco, tomando el ejemplo de lo que inició Néstor Kirchner en el país a partir del 2003.

 

Este trabajo iniciado por el legislador Rubén Torres, es el que defenderemos fielmente, porque se trata de la forma de concebir a la política. Una nueva forma que nos hará hombres nuevos.

 Bruno Pogliano

Presidente Agrupación Valle Nuevo