Tierras y Ocupaciones en suelo rionegrino ● Omar Reggiani

Pasan los meses, casi promedia el año y la Vivienda no parece prioridad en una provincia que tiene historia conflictiva en la temática del hábitat popular.
Primer trimestre de 2013, preocupación primaria el inicio de las clases en todo el territorio provincial, la Educación Derecho indiscutible, un derecho humano primordial.
Segundo conflicto para el Estado Rionegrino, la seguridad y varios hechos que repercuten en la sociedad desde situaciones virulentas en el conjunto del territorio provincial.

En ese comienzo de año pide permiso para ingresar, una discusión que no es nueva pero que frente a temas coyunturales mas graves paso como inadvertida, la TOMA de TIERRAS y el Derecho al Hábitat. Una discusión que muestra las grietas y estas permiten visualizar la desigualdad social existente frente al Derecho a la Propiedad.

Es realmente importante hacer un poco de memoria y desarrollar el historial de estos primeros meses del año para ver como se vivieron algunos hechos que refieren a la temática en cuestión, así vemos que en un Febrero caliente, desde el municipio de la ciudad de Cipolletti se pidió a la justicia que accionara, para “dar fin” a las tomas que se desarrollaban en la localidad, ese mismo mes el Gobierno Provincial deroga el protocolo para “desactivar ocupaciones” un decreto que fue firmado en el 2012 y que pretendía (vía burocrática) restituir la propiedad privada “violada” por la vía de “los ocupantes”.

Como dijo el Gobernador las herramientas para establecer limites a la ocupación de TIERRAS o Inmuebles, ya está en manos de la JUSTICIA con “el Código existente” y entonces se puede decir que “el Protocolo derogado” era solo un mensaje “político”, un mensaje que hoy debe desactivarse, un mensaje que puede traer inconvenientes y CONFLICTOS, un mensaje que se enfrenta al DIALOGO que hoy, se pretende establecer desde el Ejecutivo provincial, según lo expresado en los últimos días.

Pero ese dialogo buscado tiene una contradicción en el discurso, cuando se dice ver como “preocupante” la presencia de «muchos delincuentes» entre los ocupantes de tierras y se habla de «varias causas en la Justicia, se los acusa de estar relacionados con la droga y la verdad que en poco tiempo va a ser un lugar invivible”. Aquí es donde debemos abrir paréntesis y tener muy en claro que NO SE PUEDE JUDICIALIZAR y definir cuanta ocupación de tierras exista, como un hecho realizado por “una Delincuencia Funcional”.

Las ocupaciones de tierras son la consecuencia de la falta de políticas referidas al hábitat y la delincuencia es, decididamente, algo que se manifiesta en toda la sociedad y en un porcentaje menor. Decir que en tal o cual barrio hay delincuencia no habilita a definir ese barrio como un barrio “de DELINCUENTES”.

La localidad de Cipolletti y sus ocupaciones son la consecuencia de un Municipio “poco ágil” (así lo expresaba el Gobernador y no se equivoca), “la falta de seguridad y la proliferación de DELINCUENTES” responsabilidad de un Estado que deja crecer a “las bandas”, pero no puede hablarse de que todo OCUPA de TIERRAS ES UN DELINCUENTE, LADRON o TRAFICANTE; por ello es que será fundamental el dialogo que se manifiesta como solución por parte del Ejecutivo Provincial y es primordial la voluntad de solución por vías pacificas de una problemática compleja que lo máximo que requiere es serenidad, amplitud política y articulación con todos los poderes del Estado.

Es importante que desde la Provincia de Río Negro pueda centralizarse una política sobre el HABITAT POPULAR Rionegrino y que desde los gobiernos locales se ejecuten estrategias para la Planificación Territorial, que permitan a los sectores de menor ingreso acceder al MERCADO INMOBILIARIO.

En este sentido hay dos ejes fundamentales de acción:
POLITICA DE SUELO donde se debe intervenir en el Mercados de Tierras Local, definiendo el crecimiento urbano de acuerdo a los ejes establecidos por una planificación integral, plagada de servicios en un ejido urbano inclusivo.
POLITICA HABITACIONAL donde se deben gestionar modelos constructivos modernos, para palear el déficit habitacional existente; será fundamental obtener estadística y diagnostico de la situación inicial, para proyectar un plan efectivo de Desarrollo Habitacional Local, acorde a los diferentes requerimientos sociales.

Los Estados Locales deben comprender la responsabilidad que tienen en la solución de temáticas populares, esto no significa que los estamentos mayores del Estado (esto es la Provincia y/o la Nación) se desentiendan de los problemas, muy por el contrario, es con la articulación de ellos más el involucramiento de la sociedad civil, como pueden desarrollarse políticas efectivas de solución a temáticas complejas como el Hábitat.

El SUELO no es un producto más del “mercado” ya que no es un bien producible, un aumento en la demanda no produce más cantidad de suelo, por definición el suelo es FINITO, UN BIEN SOCIAL que el mercado inmobiliario y sus reglas de juego determinan desigualdades evidentes en cada territorio, esas desigualdades no son nuevas y los perjudicados son los sectores sociales más POBRES.
Son los Municipios y sus capacidades técnicas y de gestión, sumadas al contacto con la ciudadanía, quienes intervendrán en el territorio y fijaran las reglas para limitar la puja existente por la Propiedad Privada; gestionando y ejecutando la puesta en marcha de Programas y Políticas estatales que mejoren la calidad de vida de las personas, sus familias y la sociedad en su conjunto.

Título original: Tierras y Ocupaciones en suelo rionegrino.
La Provincia y los Gobiernos Locales.

Arq. Omar Reggiani