De perros y collares ● Ángela Vicidomini

El proyecto de modificación a la Ley Nº 200, presentado por el Bloque de la Alianza, propuso la solapada transferencia de la administración del IDEVI al plano municipal de Viedma, bajo el ropaje de una pretendida normalización del instituto que sin definir objetivos, medios, estrategias o programa alguno, ponía de manifiesto una ambición de poder tan ilegítima como caduca.

La pretendida colonización parasitaria del IDEVI, establecía una sesgada composición del Consejo de Administración, que omitía las representaciones de la Comisión de San Javier, a cuya jurisdicción pertenece la mayor parte de la superficie del IDEVI, de la Municipalidad de Guardia Mitre donde extendía su injerencia y de los organismos nacionales, diluyendo inaceptablemente las del gobierno provincial, reservando a todos papeles subalternos como convidados de piedra, en áreas de su natural incumbencia.

Los representantes de los bloques del Frente para la Victoria, denunciamos esta insólita pretensión, impedimos su progreso parlamentario y convocamos a la reunión que en la Legislatura permitió escuchar las voces más caracterizadas, comprometidas y competentes en la búsqueda de alternativas superadoras. Surgieron aportes con perspectivas de futuro, concretas y relevantes, debatiendo el uso del agua y su relación con el trabajo y la retención del valor agregado local, los proyectos de agricultura familiar, los nuevas formas de agrupamiento o clusters de producción, industrialización, comercialización, etc.

Durante el transcurso del concurrido encuentro, se expusieron al debate tantos proyectos y propuestas valiosas como pedidos de explicaciones por tantos años de devastación, lamentablemente no se escucharon por parte de los representantes de la Alianza presentes, propuestas de desarrollo, argumentos o autocríticas sobre lo actuado. Nadie quiso hacerse cargo del despilfarro de los presupuestos, el desmantelamiento de los planteles técnicos y de trabajadores, el boicot a los emprendimientos asociativos, o los arbitrarios remates que promovieron y ejecutaron para adueñarse de tierras y de proyectos familiares, por deudas insignificantes.

No nos quedaremos mirando el pasado, tampoco aceptaremos pasivamente que prevalezcan los ánimos, los hábitos y los personajes que concitan el rechazo popular y que temerariamente pontifiquen, ignorando lo actuado durante décadas, que incluyeron dieciocho años de intervenciones radicales al IDEVI durante las que impulsaron los monopolios de comercialización, el dualismo tecnológico, la concentración fundiaria, dejando sus secuelas de infraestructuras destruidas, inmigración desordenada, trabajo no registrado, evasión fiscal, pauperización y desmembramiento social.

Su notoria incapacidad de liderar políticamente la región adoptando y favoreciendo decisiones de inversión, de innovación y de trabajo cooperativo, derivaron en un esquema fundado en las ambiciones inmobiliarias de los amigos y parientes del poder que pretendieron transformar nuestro principal proyecto de riego zonal, en un country de fin de semana para el ocio de los burócratas.

Una nueva gestión se inicia en el IDEVI tendiente a su plena normalización, con presupuestos ampliado por esta Legislatura, Es tiempo de convocar sin exclusiones a los responsables jurisdiccionales, de Guardia Mitre y de San Javier, de la producción, armonizando las políticas y el uso de los recursos del Gobierno Provincial y Nacional, de las entidades intermedias, del Municipio de Viedma y de todos los que tengan proyectos, medios y trabajo para aportar.

Para culminar lo pendiente, deberemos evitar las ocurrencias interesadas, buscar la equidad, la inclusión, la igualdad de oportunidades, subsanando los desequilibrios observables en el territorio provincial, generando trabajo e inclusión, escuchando a todos, sin poner al carro delante de los caballos, ni a los responsables de esta crisis encabezando su superación.

En este camino seguramente podremos encontrarnos sin distinciones, trabajando mancomunadamente por el postergado despegue de un proyecto que nos devuelva la ilusión y la posibilidad de un futuro mejor, para todos los rionegrinos, responsablemente, sin exclusiones, privilegios, ni trasnochadas reiteraciones.

Angela Vicidomini
Vicepresidente 1º de la Legislatura Rionegrina