Obispo emérito de Viedma defendió, con énfasis, al Papa Francisco

Viedma (ADN).- El obispo emérito de Viedma, Miguel Hesayne,  defendió al Papa Francisco de las acusaciones que recibió de algunos políticos y medios de comunicación kirchneristas sobre una supuesta vinculación o colaboración con la Junta Militar durante la dictadura.Hesayne calificó de “grave calumnia” a las acusaciones, que quieren involucrar a Francisco en el secuestro de los sacerdotes jesuitas Orlando Yorio y Francisco Jalics, cuando era superior de la congregación jesuita.

“Hizo todo lo posible. En la época no era obispo para poderlo publicitar, pero sí la buscó por todos los medios (la liberación de Jalics y Yorio). Es por eso que creo firmemente, y eso lo dije ya antes, que para mi es una grave calumnia”, declaró el obispo en diálogo con Radio del Plata de la Capital Federal.

Rememorando el episodio, Hesayne recordó que “alguien que quería tener una entrevista directamente con Bergoglio, el día que fueron capturados Yorio y Jalics, lo encontró a Bergoglio en ese momento llorando y decía ‘me han secuestrado a Orlando Yorio y Francisco Jalics’”.

El obispo de Viedma, de  90 años, que durante y después de la dictadura se comprometió a luchar para los derechos humanos, recordó la intima relación de amistad y el “trato fraterno” con el Papa Francisco. Y recordó haberle dicho, durante una conversación entre ellos: “Yo ruego para que termines el servicio de obispo en Buenos Aires y que se te diga que has sido el cardenal de los pobres”.

“Se lo dije porque sabía su conocimiento de Jesús y su evangelio y de su entrega personal”. Hesayne se emocionó al destacar y elogiar la sencillez del nuevo Papa, característica que llamó la atención del mundo, remarcando la autenticidad de su conducta.

“Es austero por seguir los pasos de Jesús. Es un hombre enamorado de Jesús, y siempre fue generoso y valiente”, remarcó el obispo emérito de Viedma, actualmente radicado en Azul. (ADN)

 

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