Soria siente vergüenza porque hay más de 300 funcionarios de Weretilneck

Cipolletti/Roca (ADN).- El intendente de General Roca, Martín Soria, reconoció que tiene “una saludable relación con el gobernador Alberto Weretilneck”, pero advirtió que hay cosas que le generan “impotencia y bronca”. Señaló que “no tendría que haber más de 150 funcionarios provinciales, pero siento vergüenza porque la planta de ellos casi supera los 300”.

Además, Soria calificó de “servil colaboracionista” del anterior Gobierno provincial al ex defensor adjunto del Pueblo, Ignacio Gandolfi, quien ahora fue designado por Weretilneck subsecretario de la Función Pública.

“Sé reconocer las cosas positivas, pero hay otras que me preocupan y me generan impotencia y bronca”, admitió Soria en declaraciones a LU19.

“Con mi padre queríamos que los funcionarios tuvieran un buen sueldo para que no hicieran lo que venía ocurriendo  durante muchos años, que todos cobraban sobresueldos truchos y en negro. O peor, cometían actos de corrupción.

Agregó: “Pero, para que tengan buenos sueldos no tendría que haber más de 150 funcionarios provinciales. Uno mira hoy y, la verdad, siento vergüenza porque la planta de funcionarios casi supera los 300”.

“No hablemos de los vagos y ñoquis enquistados en la planta permanente del Estado, esos que después de años y años de cobrar sin trabajar, aparecieron de golpe”, poco después que asumió Carlos Soria.

“Ni hablar de los políticos corruptos que íbamos a meter presos por chorros, pero todavía caminan por la calle o los jueces que garantizaron impunidad durante décadas…”, dijo el intendente roquense con tono pausado.

Inmediatamente, encaró contra un flamante funcionario de Weretilneck: “El ex defensor adjunto de la Defensoría del Pueblo, este muchacho Ignacio Gandolfi, un personaje que hablaba pestes del gobernador Soria, un tipo que sistemáticamente intentó encubrir todas las fechorías del Gobierno de Miguel Saiz, servil colaboracionista de un régimen de corrupción”.

“No iba al recinto (de la Legislatura) porque para él estaba todo bien, él decía que todo era una maniobra política de Soria y de la defensora del Pueblo (Ana Piccinini). A este impresentable prácticamente lo meten por la ventana en el Gobierno como subsecretario de la Función Pública, sin consultar a nadie”, se quejó.

Observó también que “son varios los impresentables que empieza a reciclarse y me da mucha bronca”. (ADN)

 

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