Confirman cárcel a ex policía del BORA por lesiones graves a joven

Viedma (ADN).- El Superior Tribunal de Justicia confirmó la sentencia de la Sala B de la Cámara en lo Criminal de Viedma que condenó a un policía rionegrino a cuatro años de prisión por el delito de lesiones gravísimas que le provocó a un joven con el arma reglamentaria durante un operativo que efectuó el ex efectivo del BORA en Viedma.El sentenciado es José Alberto Barriga, quien fue acusado del delito de “lesiones gravísimas agravadas por haber sido cometidas con arma y abusando de su función de integrante de una fuerza policial”.

El 24 de agosto de este año, la Sala B de la Cámara en lo Criminal de Viedma condenó a Barriga a la pena de cuatro años de prisión, por considerarlo autor material y penalmente responsable del referido delito.

La defensa de Barriga sustentó que la sentencia ha valorado como principal elemento de cargo el testimonio de un excoimputado en la causa (otro policía), pero “hizo caso omiso a los demás testimonios de los efectivos policiales intervinientes, quienes descartaron la intervención de José Alberto Barriga en el hecho”.

También criticó el argumento del Tribunal referido al “espíritu de cuerpo” porque “ningún testimonio de un policía podría ser valorado con fuerza convictiva”. En ese sentido, afirmó que “ni Moyano, ni Chiappe, ni Huaracán ni Huinca vieron a Barriga con el arma en sus manos, lo que cuenta con respaldo de prueba independiente -dermotest- peritaje balístico sobre vainas servidas de 9 mm secuestradas en el lugar del hecho”.

El Tribunal viedmense tuvo por acreditado que dos efectivos realizaron sus disparos con escopetas Itaka calibre 12/70 con cartuchos AT o PG, mientras que un tercer policía y Barriga lo hicieron con sus pistolas 9 mm.

En su momento, Barriga prestó ampliación de declaración indagatoria y, en lo relevante, relató que la víctima pasó corriendo por delante del móvil policial, y precisó: “Se baja primeramente en forma inmediata, el cabo 1º Quiñenao, luego lo hace el sargento 1º Huinca, después Huaracan y último lo hago yo porque demoro unos segundos debido a que el espacio de atrás de la Ranger es muy reducido”.

Agregó: “Cuando logro bajar escucho que se dan las órdenes preventivas de alto y que se tire al piso, mientras las detonaciones seguían, cuando logro observar que delante de mí se encontraba el cabo 1º Quiñenao con rodilla en tierra efectuando disparos, mientras el sujeto iba cruzando en diagonal hacia la vereda y mientras yo trato de posicionarme debido a que Quiñenao estaba delante mío, veo que el sujeto cae al piso, en forma inmediata se dirige el cabo 1º Quiñenao hacia el lugar donde estaba caído el sujeto y yo voy detrás a prestar apoyo”.

Por su parte, el juez Sergio Barotto advirtió “el indicio de mendacidad puesto de manifiesto por el imputado, en tanto en su declaración indagatoria con base en una serie de actos que tienen que ver con su relato acerca de cómo salió cada uno de los protagonistas de la camioneta, él en un adecuado último lugar, lo que lo demoró en relación con el resto, dijo que trataba de posicionarse debido a que Quiñenao se encontraba delante y había disparado y vio que la víctima caía al piso”.

Barotto sustentó: “Además de permitir acreditar el indicio de mendacidad o mala justificación contra José Alberto Barriga -cuanto menos según dos circunstancias fácticas: la realización de disparos y el modo en que se bajaron del vehículo- los testimonios mencionados son útiles para demostrar la mejor consistencia de las manifestaciones de Sergio Q (otro policía), pues este señaló que se bajaron de inmediato los cuatro del vehículo y que efectivamente Barriga efectuó cuanto menos un disparo con arma de fuego”.

Resumió: “La revisión integral de la sentencia en el marco de los agravios deducidos permite sostener la razón suficiente de lo decidido por la Cámara (en lo Criminal de Viedma) en cuanto a la determinación de la autoría de José Alberto Barriga en el hecho reprochado”. (ADN)

 

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