Lueiro cuestiona la veracidad del aumento de las asignaciones familiares

Viedma.- El legislador Claudio Lueiro (PPR) cuestionó el anuncio realizado meses atrás por el Gobierno nacional respecto del aumento de las asignaciones familiares porque -según acusa- “algunos datos no logran ratificarlo” con la misma partida presupuestaria para el 2013 que la propuesta para este año.

 

 

“Teniendo en cuenta la reciente reforma anunciada por el gobierno nacional, ese monto debería haber aumentado un 20 por ciento, pero no sucedió. En este sentido, menos familias cobrarán asignaciones por sus hijos”, agregó el legislador del PPR.

 

Lueiro explicó que hay dos elementos que agravan la situación de los trabajadores cuando de asignaciones familiares se habla: los beneficios y las escalas salariales que se ajustaron menos que la inflación.

 

En el año 2011, por las asignaciones de trabajadores registrados y jubilados, se pagaron 12.468 millones de pesos. Este año se prevé pagar un número muy similar, 12.525 millones de pesos. Este monto debería haber sido mayor por el ajuste de los beneficios de finales de 2011 y el mayor número de trabajadores registrados. “Ahora, con la nueva reforma, para determinar si corresponde o no el pago de las asignaciones, se tendrán en cuenta los ingresos de una familia. De esta forma, más trabajadores perderán el derecho del cobro de las asignaciones o percibirán aún menos de lo que hoy reciben”, indicó Lueiro.

 

Antes de la modificación en cuestión, en Río Negro, por ejemplo, los trabajadores que tenían ingresos brutos entre 100 y 5200 pesos cobraban un fijo de 270 pesos por hijo. Con la nueva reforma existirá una escala de montos fijos a cobrar por hijo, prenatal e hijo con discapacidad, en función de los ingresos brutos del grupo familiar.

 

Por lo tanto, un grupo familiar cuyos ingresos se ubican hoy entre 200 y 3200 pesos, cobrarán 340 pesos de asignación por hijo y/o prenatal; aquellos que estén entre 3200,01 y 4400 pesos, cobrarán 331 pesos; los que perciban entre 4400, 01 y 6000 pesos, 318 pesos; y por último, de 6000,01 y 14.000 pesos, cobrarán 179 pesos de asignación.

 

“En este último caso, detalló Lueiro, el pago se habilita siempre y cuando ninguno de los ingresos familiares supere los 7 mil pesos. De esta manera, una familia rionegrina que tiene ingresos por 13.900 pesos con dos salarios brutos de 6950 pesos, cobrará 179 pesos por hijo; mientras que una familia que sólo tenga un sueldo en el grupo familiar de 7001 pesos brutos mensuales, no cobrará asignación alguna”.

 

Por otra parte, Lueiro aclaró que el monto de las asignaciones “aumentó menos de la mitad en general y está por debajo, porcentualmente, de los aumentos salariales”.

 

Familias con un solo sueldo registrado cobrarán asignaciones más bajas a las que venían recibiendo con anterioridad a la reforma. Un trabajador de cualquier ciudad de la provincia, por ejemplo, que tenía ingresos brutos por 5000 pesos, cobraba 270 pesos por cada hijo, pero en estos últimos meses, fruto de las paritarias de su actividad obtuvo un aumento salarial del 25 por ciento y pasó a cobrar 6250 pesos brutos. “En consecuencia, se redujo la asignación por hijo a 179 pesos. Además, si en los últimos años, existieron paritarias fue producto de la inflación real, por lo tanto, este aumento definido por el gobierno representa aún menos en el bolsillo de los trabajadores”, recalcó.

 

El régimen de asignaciones familiares representa en su conjunto el 12 por ciento del total de las erogaciones ANSES, de los cuales un 43 por ciento son destinados a la asignación universal por hijo, el 49 por ciento a asignaciones familiares del sector activo y un 8 por ciento al pago de asignaciones familiares del sector pasivo. Las mayores erogaciones del organismo se dan en pago de jubilaciones y pensiones, y el resto de los recursos tiene como destino el seguro de desempleo, las ex cajas que fueron transferidas al ANSES y otras transferencias, además del gasto que implica el funcionamiento del organismo.

 

Finalmente, Lueiro acotó: “Para lograr que se diluya el alto nivel de inequidad que existe en nuestro país, es necesario plantear una reforma tributaria integral. A la reforma presentada por el gobierno nacional correspondería acompañarla con una modificación en la ley del Impuesto a las Ganancias, por ejemplo, con el tratamiento de una posible eliminación de las exenciones a la renta financiera, para evitar así un incentivo a estas actividades por sobre las productivas; además, una reforma del mínimo exento determinado para el impuesto a los bienes personales (hoy en 305 mil pesos)”.

 

“Estas medidas tendientes a lograr una carga tributaria más justa para todos, acercarían el discurso oficialista y la realidad que, lamentablemente, cada día se alejan más”, concluyó el legislador del PPR.

 

FUENTE: PPR