«Noche de los Lápices»

Hoy 16 de Septiembre se cumple un aniversario más de la trágica «Noche de los Lápices», donde un contexto histórico muy diferente al que vivimos en la actualidad, nuestro compañeros fueron secuestrados por luchar, por participar, por reclamar un boleto estudiantil diferenciado, por sus derechos como jóvenes y estudiantes, aquella noche de septiembre fue secuestrado un grupo de compañeros, jóvenes militantes secundarios de la cuidad de la plata y alrededores, a las puertas de una dictadura genocida se incremento la represión en los colegios secundarios, metodología que mantuvieron durante 8 años, para acabar con la alta participación política de nuestros compañeros en los centros de estudiantes de todo el país. Fueron llevados a centros clandestinos de detención donde fueron torturados, y ni uno solo de los derechos humanos fue respetado. Pasando por violaciones, picanas, golpizas feroces e inimaginables e incontables sufrimientos.

 

¿Por qué tanta saña con los jóvenes luchadores? ¿Por qué la tortura y la desaparición? La respuesta es evidente. Porque con la dictadura militar, se abrió la puerta a un modelo que destruyó la economía nacional. Porque desmembrar a las organizaciones populares, posibilitó la exclusión social de millones de compatriotas.

 

Fueron conscientes de que se embarcaban en una batalla por cambiar el contexto social en que vivían, por una patria que incluyera a todos, por el presente que les tocaba vivir y por el horizonte a construir. Luchaban por que creían que la revolución  es posible, que la patria libre, justa y soberana también era su responsabilidad.

 

Por estos días estamos inmersos en el debate sobre si es conveniente o no que se modifique la ley electoral nacional para otorgar derecho político a los jóvenes de 16 años de nuestro país, para que puedan elegir a sus representantes. La inclusión de estos jóvenes a votar abriría un proceso de debate y de participación que complementaria las políticas inclusivas puestas en marcha en los últimos años, especialmente el mejoramiento y modernización de los procesos educativos. Y es eso, al igual que en ocasión del debate de los derechos políticos de las mujeres, lo que desata la reacción conservadora.

 

La inclusión de los jóvenes es un universo de nuevos votantes que no modificaría el mapa electoral despierta temor por que la historia enseña que a tan temprana edad la rebeldía esta a flor de piel y crean un terreno fértil para que se geste la voluntad colectiva de cambio.

Hoy existe la voluntad política de incluir a los jóvenes en el debate de qué significa comprometerse, elegir representantes, y proyectos. El debate de cual es el sentido histórico y presente de la política como herramienta de transformación y que los cambios solo son posibles si la construcción del futuro es una tarea social y colectiva que reclama el compromiso de todos.

 

 

 

 

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