ATE: Penitenciarios realizan asambleas y piden reunión con interventor del SPP
Roca (ADN).- Trabajadores del Servicio Penitenciario Provincial de Río Negro anunciaron la realización de asambleas en los diferentes penales de la provincia, con el objetivo de definir medidas frente a los hechos ocurridos en las últimas semanas. Además, solicitaron reunirse con el flamante interventor, Fernando Azcoaga, quien reemplazó al «renunciado» Walter Puebla Morón.A través de sus voceros, el gremio estatal manifestó que «los lamentables episodios ocurridos en el Establecimiento Penitenciario N 5 de Cipolletti podrían haberse evitado si las numerosas denuncias realizadas desde ATE hubieran sido escuchadas. Es que el sindicato de los estatales en reiteradas oportunidades denunció la alarmante precarización laboral que sufren los trabajadores del sector en las distintas penitenciarias de la provincia».
«A la falta de respuestas durante años, ahora se le suman los compromisos incumplidos por las actuales autoridades, situación esta que será analizada en distintas asambleas y no se descarta que puedan resolverse distintas medidas de fuerza en las próximas horas».
Desde ATE se adelantó que «se presentará oficialmente un pedido de audiencia con el interventor Fernando Azcoaga».
Consideraron también que «de lo ocurrido en Cipolletti -el asesinato de un interno del Penal 5- debe responsabilizarse a las autoridades provinciales y a la desidia demostrada durante años por los distintos gobiernos provinciales. A pesar de haber existido una importante inversión edilicia en esa penitenciaria, no se hizo lo propio en materia de recursos humanos y condiciones laborales».
«Tanto en este Penal como en el resto de la provincia (Roca, Choele Choel, Viedma) la precariedad laboral está presente desde hace años. El personal penitenciario lleva adelante riesgosas tareas, en pabellones sin resguardo alguno, para los internos y para la integridad física de los celadores».
«Las condiciones de trabajo son infrahumanas. Hoy hay falta de personal y superpoblación de internos, cuestión que hace imposible garantizar la seguridad de los detenidos. La falta de elementos de seguridad hace que los empleados se encuentren en desventaja, frente a los detenidos a la hora del traslado de presos o en las tareas de prevención de protestas. Existe también carencia de toda tecnología, como equipos de comunicación, teléfonos o handies, detectores de metales, móviles, chalecos de seguridad y otros. La realidad actual violenta cualquier protocolo de seguridad».
Luciano Costa, penitenciario y delegado de ATE, señaló que «nuestra precariedad laboral se ha acentuado con el correr de los años, sin que existan respuestas concretas a nuestros planteos y voluntad de invertir los recursos necesarios para el mejoramiento del sistema carcelario en su conjunto. Ya hemos hablado y escrito bastante, creemos que llegó el tiempo de ejercer otros derechos, los que serán analizados en asambleas».
Respecto a la decisión de intervenir el Servicio Costa mencionó «esperemos sea el inicio de un cambio, aunque nuestra experiencia, no nos permite tener optimismo».
Rodolfo Aguiar, titular de ATE Río Negro, consideró que «lamentables episodios como los de Cipolletti van a seguir ocurriendo, hasta que no desaparezca la desidia demostrada por los gobiernos. Son los trabajadores penitenciarios en condiciones infrahumanas quienes han sostenido el sistema, poniendo en riesgo hasta su propia vida. Esta situación no da para más y esperemos ser atendidos por el nuevo Interventor. Estamos decididos a dejar de escuchar falsas promesas y evaluar cambios concretos. Esto no se soluciona con palabras, se soluciona con plata”. (ADN)
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