Visita oficial a la Lobería

El Cóndor.- El legislador Pedro Pesatti visitó, con la comisión de vecinos del balneario La Lobería, las instalaciones que tiene el estado provincial en el balneario y en la reserva faunística de Punta Bermeja junto al ministro de turismo de Río Negro, Angel Robira Bosch, y a la secretaria de medio ambiente Laura del Valle Juárez. 

El parlamentario destacó «la colaboración que los vecinos quieren prestarle a nuestro gobierno» y «la fuerte determinación que tiene el gobernador Weretilneck de potenciar viejas y nuevas iniciativas que están vinculadas a la puesta en valor de todo nuestro litoral atlántico».
En tal sentido, puntualizó que «el Ministro de Turismo expresa una idea de desarrollo de nuestra costa que pone en el justo equilibrio la necesidad de explotar lo que tenemos sin caer en el facilismo de dejar que las cosas se hagan sin criterio y para quedar bien con todos. Por eso -agregó Pesatti- es muy importante la fuerte articulación que hoy tiene el ministerio de turismo con la secretaría de medio ambiente, que dirige la ingeniera Laura del Valle Juárez, porque del diálogo permanente entre esos dos organismos se producirán las mejores políticas para poner en valor recursos inigualables como el que tenemos en el área protegida de Punta Bermeja».
Pesatti explicó que «la infraestructura que tiene el estado en el balneario está prácticamente destruida, y es necesario invertir mucho dinero para llegar a la temporada con una oferta a la altura de lo que hoy está demandando el turismo que nos visita porque viene de un estado de abandono y desidia de varios años. Necesitamos servicios de calidad, infraestructura que funcione y un nuevo camping que el ministerio de turismo comenzará a construir sobre nuevos criterios.
De la misma manera -opinó- es interesante el trabajo que está haciendo la Secretaría de Medio Ambiente para reparar el Centro de Interpretación de la Reserva de Punta Bermeja y la responsablidad con la que esta actuando para generar un nuevo sistema de miradores que garanticen la máxima seguridad para el visitante, sobre todo considerando los últimos desprendimientos que ponen en evidencia la seriedad con la que debemos repensar la presencia del público en los acantilidados.»