Dos meses de condena, sin ir a la cárcel, por una pelea

Bariloche (ADN).- Fue confirmada por el máximo Tribunal rionegrino la sentencia del Juzgado en lo Correccional Nº 10 de Bariloche, que condenó a un hombre a dos meses de prisión de ejecución condicional por el delito de lesiones leve durante un violento ataque ocurrido en un local en  la ciudad.La defensa de Juan Carlos G. había expuesto que el Juzgado barilochense efectuó “una errónea y arbitraria valoración probatoria, porque solamente analiza lo dicho por la supuesta víctima y sus dos testigos, que son sus amigos, obviando total y absolutamente cuatro testigos de descargo”.

Como otro vicio ostensible, el abogado Fridel Calancha Gómez señaló el hecho de que no correspondía accionar al Ministerio Público, porque “se trata de un delito de orden privado”.

Pero, el juez Víctor Sodero Nievas refirió que  se recibió declaración testimonial a ocho personas y “no se dejó constancia del contenido de todos estos testimonios en las actas de debate, ni se verifica petición alguna para que se consignara en ellas algún dicho o circunstancia de importancia para la defensa”.

Agregó: “De tal modo, es esta, la recibida en la audiencia debate, la única prueba testimonial con que se cuenta y debe ser evaluada y no la agregada en la instrucción, como pretende la defensa, a la luz de lo plasmado en el fallo por el Juzgado en lo Correccional”.

La víctima del hecho señaló en su declaración testimonial que, en momentos en que se retiraba del local, cerca de la barra, sintió un primer golpe, no muy fuerte, aplicado desde atrás, y cuando se dio vuelta observó al imputado, quien le propinó un fuerte golpe en la nariz y la boca, por lo que comenzó a sangrar. Dio cuenta además de que esta acción fue sorpresiva.

Esa circunstancia fue corroborada por dos testigos, que integraban el grupo de la víctima y afirmaron que estaban cerca de la barra cuando apareció (el atacante) de manera imprevista y, sin mediar palabras, le aplicó un golpe de puño en la nariz a la víctima. Narraron que al salir del local hubo algunas discusiones afuera que no pasaron a mayores y ambos vieron a la víctima sangrando. (ADN)