Albrieu habló del feminicidio y de la despenalización del consumo de drogas

Viedma (ADN).- El diputado nacional Oscar Albrieu (FpV-Río Negro) destacó anoche en Viedma la importancia de las leyes relacionadas con la derogación del avenimiento en los delitos sexuales y el feminicidio y, además, reafirmó  por la despenalización del consumo de estupefacientes que “el Estado no se puede inmiscuir en la vida privada de las personas cuando no se causen daños a terceros”.Albrieu ofreció anoche una charla acerca de esos temas, que se realizó en la Biblioteca de la Legislatura. Pocos minutos antes dialogó con periodistas de ADN y Canal 10.

Explicó que la ley de feminicidio plantea “agravar las penas  en los casos de las muertes de mujeres por parte de hombres por odio de género”.

“Se trata de casos tan dolorosos y frecuentes en el país, que un hombre mata a una mujer porque no quiere continuar o iniciar una relación”, señaló el diputado nacional.

De la charla ante un numeroso grupo de personas, refirió que “hablaremos también de varios proyectos en tratamiento (en la Cámara de Diputados) y anticipó que el próximo lunes “comenzaremos a debatir en reunión previa de las comisiones la despenalización del consumo de estupefacientes, que ya ha sido declarado inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia de la Nación”.

Agregó: “Queremos darle forma legal para sacar del Código Penal todo tipo de actividades que se producen en un ámbito privado, sin trascendencia para terceros, y que según la Constitución están exentas de las autoridades o de los magistrados”.

“Queremos trata también la Ley por Jurados para incluir los juicios penales de todo el país, como forma de que el pueblo participe impartiendo justicia en los procesos penales. Estas son algunos de los temas que voy a tratar”.

De la despenalización del consumo de estupefacientes, Albrieu admitió que “es una ley que genera un importante debate, porque hay opiniones a favor y en contra, pero más allá la Constitución nacional y los tratados internacionales marcan con claridad que el Estado no se puede inmiscuir en la vida privada de las personas cuando no se causen daños a terceros”. (ADN)