Denuncian brutal agresión en Comisaría de Cipolletti

Una mujer denunció que fue agredida mientras intentaba realizar una exposición policial en la Comisaría 24 del barrio Don Bosco. Dijo que la esposaron y la golpearon, además de haber sido increpada constantemente por el oficial de servicio. Desde la unidad negaron los hechos y alegaron que la mujer exigía un procedimiento que no podían llevar a cabo porque era ilegal.

Según publicó hoy el diario La Mañana de Cipolletti, todo comenzó en la mañana del viernes cuando la joven, con domicilio en Neuquén capital, llegó hasta una vivienda del barrio Luis Piedrabuena para retirar a su hija de 13 años que estaba de visita en la casa de la abuela. Ante la negativa de entregar a la menor, la joven madre comenzó el procedimiento para exigir la restitución. En primera instancia, llegó a la Comisaría 24 para realizar la denuncia y pedir que la nena le fuera entregada por la fuerza. Pero desde la unidad se negaron y solicitaron la intervención del Juzgado.

Sin embargo, según la mujer, desde la Justicia le exigían una exposición policial para poder intervenir, y la joven debió concurrir nuevamente al destacamento para formalizarla.

“Llegué hasta la comisaría acompañada por mi prima. Desde un primer momento el oficial de servicio que me atendió lo hizo en malos términos. Gritaba, tiraba el teléfono y no quería tomarme la denuncia”, explicó Belén Sandoval.

Tras lograr que una agente le tome declaración testimonial y cuando estaban solas en la oficina, ingresó nuevamente el oficial de servicio a increparla, según su relato. “Vos dejate de romper las pelotas, ya me tenés re podrido”, habría gritado el hombre antes de arrojarle el teléfono celular. “Me dijo que me retire y me amenazó con que, si no me iba, me metía al calabozo”, contó.

Pero lo peor aún estaba por venir. Sandoval señaló que cuando se estaban retirando llegaron cinco agentes femeninas y la redujeron. Con forcejeos, patadas e insultos de por medio, la esposaron con las manos hacia atrás y la metieron de nuevo a la oficina. “Todo lo que pasó fue por orden de este oficial que me maltrató desde un primer momento. Me hicieron caer contra un banquito, me pegaron patadas en el piso y me tiraron el pelo. Una de las oficiales hasta llegó a sacar una navaja del bolsillo”, relató. Más tarde la dejaron en libertad, pero en su caminata fue acompañada de cerca por un móvil policial durante varias cuadras.

“Apenas salí fui hasta el hospital, donde constataron las lesiones. Tengo heridas en las muñecas, piernas y el cuello, todo constatado mediante certificado médico. Mañana voy a formalizar la denuncia en Fiscalía. Ninguno de los policías se quiso identificar, en ningún momento”, afirmó la joven neuquina.